Las enfermedades transmisibles son enfermedades que se transmiten entre personas y entre animales y personas. Son causadas por microorganismos infecciosos o sus productos tóxicos.
El tratamiento de estas enfermedades se basa en medicamentos cuando existe ese tipo de manejo y en las medidas para disminuir la transmisión de la enfermedad y bajar el número de casos infectados.
Para mantener el control de la transmisión, de enfermedades de importancia de salud pública, en Chile existe la Vigilancia Epidemiológica de Enfermedades Transmisibles de Notificación Obligatoria.
Este sistema permite detectar a tiempo, verificar los casos, analizarlos y tomar las medidas de salud pública necesarias para el control.
Se basa en la vigilancia de las enfermedades, la vigilancia de los exámenes de laboratorio relacionados con estos microorganismos y la vigilancia ambiental donde éstos se desarrollan. Es así como se han definido:
- Enfermedades de notificación inmediata: que debe hacerse durante las 24 horas del día, en el momento en que se sospecha el diagnóstico. Entre ellas están las infecciones causadas por virus como: Infecciones respiratorias agudas graves, sindrome cardiopulmonar por hantavirus, ébola, sarampión, rubeola, rabia humana, fiebre amarilla, fiebre del Nilo occidental, poliomielitis.
Algunos ejemplos de infecciones causadas por bacterias de notificación inmediata son difteria, cólera, enfermedad meningocócica. - Enfermedades de notificación diaria: Ejemplos de infecciones causadas por virus, son malaria, triquinosis/SIDA. Por bacterias son coqueluche, tifoidea, tétanos. También por otros agentes como enfermedad de Chagas, hidatidosis.
- Enfermedades de notificación a través de centros centinelas: están incluidas influenza, infecciones respiratorias, diarreas en menores de 5 año, enfermedades de transmisión sexual, varicela.
El listado de todas las enfermedades está publicado en el Decreto Supremo 158 del Ministerio de Salud, otros decretos, circulares, resoluciones y las normas técnicas específicas disponibles en: http://epi.minsal.cl/aspectos-legales-circulares/
Descripción de las enfermedades transmisibles más comunes a través del contacto de las manos con el árbol respiratorio y la superficie de la piel en general
Las manos son las grandes transmisoras de microorganismos patógenos que pueden afectar al sistema respiratorio, digestivo y otros.
Las infecciones respiratorias se transmiten a través del aire, por gotitas de saliva y secreciones nasales que se liberan al toser o estornudar. Las manos, se contaminan al sonarse o taparse la boca al estornudar y al tocar superficies contaminadas.
Por ello es importante el lavado frecuente de las manos y el taparse la boca al toser o estornudar cuando se está enfermo. Si es factible, el enfermo debiera usar una mascarilla si está con otras personas. Con ello, evita la diseminación de las gotitas infectadas hacia otras personas y hacia las superficies que pueden ser tocadas con las manos de otros.
Las enfermedades transmisibles más comunes del aparato respiratorio en que las manos tienen participación en la transmisión son:
Infecciones respiratorias agudas de las vías respiratorias superiores que incluyen las infecciones que comprometen desde la fosa nasal (nariz) hasta las cuerdas vocales (laringe). Ejemplos son resfrío, otitis, faringitis, sinusitis, laringitis, epiglotitis.
Infecciones respiratorias agudas de las vías respiratorias inferiores que incluyen las infecciones que comprometen desde la tráquea hasta los alvéolos pulmonares. Ejemplos son bronquitis aguda, neumonía, bronconeumonía, bronquiolitis.
Resfrío común
Muy frecuente especialmente en época invernal. Producido por varios virus. Es altamente transmisible a través de las gotitas que se expelen al toser, estornudar, sonarse.
Por lo tanto, la forma de contagiarse es:
- Estar cercano a una persona que tose o estornuda
- Tocar con las manos superficies contaminadas como escritorios, ropa de cama, manillas de puertas. Las manos si van a la cara, cargadas de virus, son el vehículo para que los virus ingresen por la boca y nariz a la garganta y resto del aparato respiratorio.
- Dar besos o compartir vasos u otro utensilio porque la saliva también es vehículo para transmitir los virus
- Tocar, apretar la mano, dar abrazos. Por contacto directo con la piel especialmente de las manos que se contaminan con los virus
Los síntomas son coriza o secreción nasal, estornudos, congestión de la nariz y garganta. En general es afebril. El período de incubación, o sea, el tiempo entre el contacto con el virus y la aparición de los síntomas es entre 2 a 4 días.
El resfrío, en personas sanas, es benigno, alrededor de 7 días y se resuelve espontáneamente. Para el tratamiento se usan medicamentos sintomáticos como paracetamol, abundantes líquidos tibios.
Influenza
Producida por el virus de la influenza. Los síntomas son más intensos y aparecen en horas. Lo que predomina es la fiebre, cefalea (dolor de cabeza), odinofagia (dolor de garganta), tos, dolores musculares, dolores de articulaciones, decaimiento y molestias con la luz.
Mejora espontáneamente en un plazo de 7 días, si no hay complicaciones como neumonía que se da en personas de más edad o en niños pequeños, personas con factores de riesgo como hipertensión, diabetes mellitus, disminución de la inmunidad.
También se contagia por las gotitas de saliva y secreciones respiratorias que se expelen al toser, estornudar y sonarse. El principal mecanismo es a través de las manos, que tocan superficies contaminadas. Si las manos tocan la cara, el virus ingresa a las vías respiratorias.
El período de incubación (tiempo entre el contagio y los síntomas) es de 1 a 4 días. Lo importante es que el período de contagiosidad de una persona a otra, es dos días antes de la aparición de los síntomas hasta 5 días después. Por ello, el mantener una rutina de lavado de manos frecuentes es importante. Para prevenir la enfermedad y las complicaciones, el país ha incorporado la vacuna anti influenza anual que está inserta en el Programa Nacional de Inmunizaciones.
Faringitis
Es una infección que afecta a la faringe. Lo más relevante es el dolor de garganta. Puede ser producida por virus o por bacterias.
Amigdalitis
Cuando además de la faringe, afecta a las amígdalas que se infectan por una bacteria, al examen se detecta una placa blanquecina además de ganglios en el cuello. En estos casos el diagnóstico es de amigdalitis aguda bacteriana y se requieren antibióticos para su manejo.
Síndrome cardiopulmonar por hantavirus.
Es una infección respiratoria aguda que se produce por un virus ARN del género hantavirus, de la familia Bunyaviridae.
La transmisión es por inhalación de aerosoles de las heces, orina y saliva de roedores portadores. También, por el ingreso del virus a boca, nariz y conjuntiva ocular a través de las manos contaminadas con el virus o por contacto íntimo con un paciente. En Chile se presenta en los meses de primavera y verano y los casos se han presentado entre la región de Valparaíso y la región de Aysén.
El período de incubación es largo, entre 1 y 3 semanas hasta 45 días post exposición en algunos casos.
Los síntomas se relacionan con el antecedente de haber estado expuesto a la presencia de roedores silvestres y haber realizado actividades como desmalezar, limpiar casas deshabitadas.
En la primera fase de la enfermedad, llamada fase prodrómica, que dura aproximadamente 6 días, la persona presenta fiebre, cefalea (dolor de cabeza), mialgias (dolores musculares) y de articulaciones; también puede presentar molestias digestivas como náuseas, diarrea. El examen de sangre hemograma está alterado mostrando baja de plaquetas y signos de infección. En la radiografía de tórax hay imágenes de infiltrado que hacen sospechar esta infección.
En la segunda fase de la enfermedad llamada fase cardiopulmonar, se agrega bruscamente tos, disnea (dificultad para respirar), baja de presión arterial. Hay falla respiratoria y circulatoria en que un 30 a 40% de los pacientes fallecen.
En la tercera fase, llamada fase de convalecencia, quienes sobreviven recuperación respiratoria y circulatoria. Puede durar hasta 3 meses.
https://diprece.minsal.cl/programas-de-salud/programas-enfermedades-transmisibles/informacion-a-la-comunidad-de-enfermedades-respiratorias-agudas/influenza/
https://diprece.minsal.cl/wrdprss_minsal/wp-content/uploads/2015/02/Guía-HANTA-completa.pdf
Neumonía
Es una infección de los pulmones. Sus síntomas tienen una duración de 3-4 semanas y es más común en niños muy pequeños y personas de edad avanzada.
Los síntomas son tos, fiebre y dificultad respiratoria. Puede ser producida por bacterias y por virus.
Lo importante es que se adquiere:
- En la comunidad: (neumonía adquirida en la comunidad)
- En el hospital: neumonía intrahospitalaria
- En ventilación mecánica: neumonía asociada a ventilación mecánica
El lavado de manos para no contaminar a otros pacientes ni a superficies es indispensable para reducir la transmisibilidad
https://www.europeanlung.org/es/enfermedades-pulmonares-e-informaci%C3%B3n/enfermedades-pulmonares/infecciones-respiratorias-de-v%C3%ADas-bajas
Infecciones agudas respiratorias producidas por coronavirus:
- Síndrome respiratorio agudo grave (SAR CoV-1)
- Síndrome respiratorio del Medio Oriente (MERS)
- Enfermedad COVID-19 producida por coronavirus SARS-CoV-2
Los nuevos virus SARS y también los de la influenza, son motivo de preocupación de salud pública, porque causan brotes epidémicos a gran escala con alto número de casos y alta mortalidad en personas con factores de riesgo.
La enfermedad COVID-19, causante de esta pandemia, está producida por el virus SARS-CoV-2. Afecta a muchas personas y es capaz de saturar la atención de salud. Puede producir cuadros graves. No hay vacuna y ni tratamiento antiviral específico aún. Los síntomas van desde sin síntomas hasta síntomas semejantes a una gripe y también dificultar respiratoria grave.
Por ello, la reducción de la trasmisión a través del lavado de manos, uso de mascarilla y mantención de la distancia física es muy importante. Los coronavirus, al igual que otros virus respiratorios se transmiten por gotitas y aerosoles que pueden quedar suspendidos en el aire por un tiempo. También quedan en la superficie.
El lavado de manos limpia la suciedad y arrastra los microorganismos.
El alcohol gel desinfecta las manos que ya están limpias.
Ello evita que las manos trasladen los virus hasta la boca, nariz y conjuntiva ocular que son las puertas de entrada para el virus.